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La halitosis, más bien conocida como mal aliento, es muy común entre la población, sobre todo adulta. Y aunque suele estar relacionada con una mala higiene bucodental, en ocasiones ni siquiera ésta capaz de combatirla. ¿Por qué?
La halitosis puede ser causada por los alimentos que ingerimos, problemas bucales u otras problemáticas, por lo que debe ser diagnosticada por un profesional para encontrar la causa y posible solución. Pero las principales causas de la halitosis son varias, y hoy te queremos hablar de ellas.
¿Qué es la halitosis?
La halitosis, o mal aliento crónico, es un problema que causa un desagradable olor que procede del aliento de una persona. A diferencia del típico mal aliento mañanero o que queda tras ingerir algunos alimentos, la halitosis es un aliento fuerte que se mantiene durante un periodo extendido de tiempo.
Principales causas de la halitosis
Las causas de la halitosis pueden ser variadas, aunque la mayoría están relacionadas con la ingesta de algunos alimentos o problemas bucodentales. Estas son las principales causas de la halitosis:
Mala salud e higiene bucodental: se trata de la causa más común del mal aliento. Si no te lavas los dientes y la lengua con regularidad o de la forma adecuada, las partículas de los alimentos pueden permanecer en la boca, causando la acumulación de bacterias en los dientes y la lengua, lo que produce el mal olor de la halitosis.
Comidas y bebidas de sabor intenso: algunos tipos de comidas y bebidas tienen partículas que causan mal olor y que ingresan en el torrente sanguíneo, llegando hasta los pulmones, desde donde afecta al mal aliento. Algunos de estos alimentos y bebidas son la cebolla, el atún, el café o el alcohol, comidas picantes y con alto contenido en azúcar y dietas altas en proteínas y/o bajas en carbohidratos.
Tabaco: todos los productos a base de tabaco causan mal aliento y causan problemas de salud bucal y de salud en general, además de dejar un mal aliento en la boca.
Problemas digestivos: la mala digestión, la constipación y los trastornos intestinales pueden causar olores desagradables en el aliento.
Boca seca: la saliva ayuda a mantener limpia la boca, eliminando aquellas partículas de alimentos que provocan el mal aliento. Si la producción de saliva disminuye o se detiene, es probable que aparezca un problema de halitosis.
¿Qué tratamientos existen para combatir el mal aliento?
Para reducir el mal aliento o prevenir la halitosis, existen algunos tratamientos y soluciones que puedes aplicar en casa, la mayoría enfocados a la higiene bucodental:
Lavarte los dientes: es importante que te cepilles los dientes después de cada comida o, como mínimo, dos veces al día. Hazlo con dentífricos con propiedades antibacterianas, ya que ayudan a prevenir el mal aliento. Cepíllate también la lengua.
Tratar tus enfermedades bucodentales: si la halitosis es el resultado de una enfermedad bucodental, consulta con un especialista que pueda detectarla y tratarla adecuadamente.
Usar hilo dental: utilizar hilo dental una vez al día eliminará aquellas partículas bacterianas que se quedan entre los dientes.
Limpiar las dentaduras o aparatos de ortodoncia: si utilizas una dentadura o un aparato de ortodoncia, límpialos correctamente una vez al día. Si utilizas retenedor o un protector bucal, límpialo siempre que te lo coloques en la boca.
Usar enjuague bucal: si tu mal aliento se debe a la acumulación de placa bacteriana en los dientes, el uso de un enjuague bucal que elimine estas bacterias ayudará a combatir el mal aliento.
Ajustar tu dieta: una dieta equilibrada combatirá el mal aliento y te ayudará a tener una buena salud en general.
Y por supuesto, visita a tu dentista y acude a revisiones, como mínimo, cada seis meses para asegurarte de que tu salud e higiene bucodental son correctas. Y así, si tienes algún problema de halitosis o alguna enfermedad bucal, podrás detectarla y solucionarla a tiempo.
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